Capítulo 002 - Titanic

Advertencia: Si aún no has visto Titanic sáltate el párrafo siguiente para no sentir lo mismo que sentí yo antes de verla. 

   Hace unos cuantos años (recuerdo que aún se compraban las entradas del cine en pesetas) yo era la única persona en el Mundo con pantallas gigantescas que no había visto Titanic. Llegó un día que el runrún a mi alrededor se hizo insoportable y los rumore, rumore, como diría Raffaella Carrà, se tornaron permeables a mí… vamos, que aprovechando que esa semana la echaban en El Peliculón me dije: ‘Antes de que me cuenten la aventura transatlántica de James Cameron, ahora que comienzo a tener grietas, la voy a ver’. Sabía que era una historia de amor, con temazo incluido de Celine Dion, entre un jovencísimo Leonardo DiCaprio y una no tan conocida ni estelar, a priori, Kate Winslet, y por supuesto suponía que era un drama, porque el barco se hundía, se hundía… pero lo que no quería saber, lo que no quería ni esperar, lo que nunca jamás querría ni imaginar, iluso de mí,  era que Leo muriese congelado. ¡Nooo! Y tuvieron que ser los iluminados que montaron la promo de la tele los que sacaron al Rey del Mundo tiritando y de color Pantone azul sobre una madera en alta mar despidiéndose de la Winslet. En ese momento abrí la ventana del comedor de mi casa y grité desesperado: ‘¿Por qué?, ¿por qué?, ¿por qué?’...

-Sigue Engatusado por el 7º Arte en Las Provincias de Castellón- 

   Como ha sucedido en EEUU, donde ha arrasado más que el Katrina, recién estrenada Los Juegos del Hambre también se ha colocado líder en la taquilla española, convirtiéndose por méritos propios en el fenómeno del año a la espera de los dos bombazos que llegan después del verano… y antes de que se haga efectiva la profecía de los Mayas: El Caballero Oscuro 3 y El Hobbit, esperadísima precuela de El Señor de los Anillos.

   En nuestra querida España sólo una peli made in se ha colocado en el Top Ten del último mes (… y la cosa pinta bastante mal): Grupo 7, con Mario Casas a la cabeza, y films extranjeros como la brillante Intocable, Battleship, la peli de animación Lorax. En busca de la Trúfula perdida, la mencionada Titanic en 3D, Todos los días de mi vida e Ira de Titanes alternan posiciones sin salir de esos diez primeras puestos, a la espera de estrenos como American Pie: el reencuentro, Los Vengadores de Marvel, Un lugar donde quedarse y Sombras tenebrosas (lo nuevo del dúo gótico Tim Burton & Johnny Depp). Y viendo este panorama yo me pregunto: ¿Qué le pasa a nuestro cine? ¿Por qué el espectador le da, año tras año, la espalda? ¿Es que le hemos cogido manía o es que uno va a las salas en busca de ‘algo’ que no existe en nuestras películas? No lo sé… pero es ‘algo’ a lo que se le tendría que estar buscando una respuesta para saber en qué estamos fallando… y no creo que el problema sea únicamente el maldito dinero. En fin, espero & deseo que The Pelayos (historia de los Pelayo desbanca-casinos de toda la vida), con el castellonense Miguel Ángel Silvestre a la cabeza junto con el catalán, más internacional, Daniel Brühl, corra mejor suerte tras inaugurar la XV Edición del Festival de Cine de Málaga; así que, ¡hagan juego, señores, hagan juego!

Mad Men (5ª Temporada)

Os lanzo la pregunta del millón: ¿Cuál es la mejor serie de televisión del momento? Tic-tac-tic-tac… ¿La que gana más premios o lo que tiene más audiencia? ¿Y si la que gana más premios es la que más audiencia tiene?: Entonces ¿esa es la mejor? Pues supongo que depende de con quién hables te dirán una cosa u otra, como la vida misma. Para mí, engatusadamente escribiendo, la mejor serie de la actualidad es Mad Men. Y esta entre-semana, por fin, he visto el primer capítulo doble de la 5ª Temporada.

   Pero no ha sido tan sencillo negociar la emisión de esta temporada, porque uno de los contras que tiene hacer una serie de calidad, que además cuenta con muchísima audiencia (en EEUU estamos hablando de millones de espectadores), es que todo el mundo quiere más (... y más en tiempos de Crisis). Por eso la gran duda que sobrevoló a Mad Men fue ¿renovación o cancelación? That was the question. Y como todos querían un trozo de pastel más grande peligró, ¡ya lo creo que peligró!, el estreno de esta 5ª Temporada por una lucha sin cuartel entre su creador y productor ejecutivo, Matt Weiner, el canal que la emite AMC, y que apostó por ella, y los estudios donde se graba la serie, Lionsgate TV. Todo esto porque Don Draper y compañía lo valen…

   Sí, porque desde el minuto 1 del primer episodio se percibe que Don Draper (Jon Hamm) es, lo que vulgarmente se llama, el puto amo. Él es el James Bond de la publicidad, ambos atormentados por su pasado pero con una pequeña gran diferencia: Draper está casado. ¡Y vaya si está casado!... La ‘desafortunada’ es "Betty" Draper (January Jones). Y digo lo de la mala fortuna porque el ¿bueno? de Don porta la promiscuidad por bandera. Pero como que de eso ya hace tantísimo tiempo… ahora toca ponerse al día: Comienza, por fin, la 5ª Temporada y vemos a un Don Draper más padre de familia que nunca. Recién casado con su exsecretaria, y exniñera de sus hijos, la bella & joven Megan Calvet (Jessica Paré), de origen franco-canadiense (fundamental para “entender” este primer capítulo doble… lo digo por el numerito musical de Mrs. Draper que “tanto” gusta a Mr. Draper), él es el publicista por el que tod@s preguntan, con el que todos, y especialmente todas, quieren STAR. Ha pasado de mal-vivir alquilado en un sombrío apartamentucho a la vida en pareja en un nidito de amor más típico de Austin Powers. Pero el día a día en la agencia de publicidad Sterling, Cooper, Draper & Pryce no es que haya cambiado mucho, eso sí, el lío cada vez va haciéndose más grande, y la bola de nieve me temo que muy pronto se transformará en bola de fuego: si Draper es el creativo estrella de la empresa, su creativa nº 1 sigue siendo "Peggy" Olson (Elisabeth Moss), que tiene a su cargo a la actual esposa de su jefer, Megan Draper. "Pete" Campbell (Vincent Kartheiser), que es el ejecutivo de cuentas más perspicaz de la agencia, está en continua disputa con uno de los capos del tinglado, que no es otro que el veterano Roger Sterling (John Slattery), y entre ambos se las apañarán para hacerse la vida imposible. Roger, a su vez, en un calentón dejó embarazada al final de la anterior temporada a la exuberante Joan Holloway (Christina Hendricks), jefaza de secretarias, que en esta 5ª acaba de dar a luz, pero mantiene en secreto quién es el verdadero padre de la criatura porque su marido está en Vietnam, ejerciendo de médico. Y además tenemos a Lane Pryce (Jared Harris), que se encarga del money con una precisión británica y al señor Cooper (Robert Morse), el otro socio fundador de la empresa, un poco a verlas venir.

   Pues bueno, después del 5x01 y el 5x02, a priori, parece que la tensión se ha convertido en guateque. El 40 cumpleaños de Don, que recuerda que lleva ya medio año en la cuarentena (Don Draper – Publicista es su alter ego, ya que él en verdad se llama Dick Whitman), absorbe la trama en estos dos primeros capítulos que inauguran la temporada… en los me surge una duda existencial: ¿Dónde está "Betty" Draper? ¡Por Dios, Carlos, trata de arrancarlo, que la echamos muchísimo de menos! Y como no me he podido aguantar ya he salido de dudas en el 5x03, que dirige el propio Jon Hamm. Pronto seguiré informando… como si fuese un hombre loco.

Este verano... To Rome with love

No lo puedo evitar, llámame romántico, llámame tontorrón, pero es ver-escuchar o incluso sentir que lo nuevo nuevísimo de Woody Allen está al caer y como dijo Roberto Benigni cuando recibió su ¿inesperado? Oscar al Mejor Actor en la gala de 1999: ¡My body is in tumulto!

  

   El título ya de por sí me vuelve loco: To Rome with love. Muy a lo James Bond. Me encanta: I love you. El reparto, como casi siempre, acontece un cartel bastante variado entre otros con Pe (hablo de nuestra Penélope Cruz, más voluptuosa y exuberante de lo normal), Alec Baldwin (magistral en la serie de la NBC Rockefeller Plaza), el mencionado "monstruo" Roberto Benigni, Jesse “Facebook” Eisenberg, Ellen "Juno" Page, Judy Davis (una habitual del cine de Allen) y el propio director que vuelve (gracias a Dios) a la interpretación... a su comedia. Y sobre el argumento, del cual había trascendido bastante poco debido al hermetismo (secreto) que rodean estos eventos cinematográficos, descubrimos viendo su tráiler que sucede, como no, en la maravillosa ciudad eterna (a la que todos volvemos) y nos muestra varias historias ¿paralelas? entre turistas americanos intercaladas con propios nativos & ¿nativas italianas? (incluyendo a la de Alcobendas, que ya ganó el premio David de Donatello a la Mejor Actriz por su papelón en No te muevas)... y ya veremos si con algún nexo en común más, además de Roma.

    Lo que sí que podemos observar de ipso facto es que se trata de una comedia, y si en la misma frase aparece comedia y Woody Allen, se me saltan las lágrimas… de emoción. Pero si además añadimos el adjetivo romántica, ya la sonrisa que se instaura en mi cara no tiene precio. Y eso es algo que surge cuando este hombre decide que ese año toca hacernos un poquito más felices. Esta nueva aventura europea del genio de New York, New York tras su irrupción en Barcelona con Vicky, Cristina, Barcelona y su paseo por Paris con la oscarizada, al Mejor Guion Original, Midnight in Paris, nos recuerda que a sus casi 80 años el maestro sigue sin colgar la cámara. ¡¡¡Larga vida al maestro!!! Tendremos que esperar a verano para "regresar" a Roma...

*Aquel año de La vida es bella, Roberto Benigni competía contra Tom Hanks (Salvar al soldado Ryan), Edward Norton (American History X), Ian Mckellen (Dioses y Monstruos) y Nick Nolte (Aflicción), que también estaban nominados, y no era favorito en ninguna quiniela (bueno, en alguna italiana seguro que sí). A pesar de ello se llevó la estatuilla dorada a casa dando bastante espectáculo en el patio de butacas y subiendo a recoger el premio con un inglés más típico de las películas del genial López Vázquez: ¡¡¡Vámonos a la beach!!!